“Comparación del estado nutricional, según el consumo alimenticio y actividad física en adolescentes del género femenino de 12 a 17 años en la zona rural de osa, Puntarenas y el gran área metropolitana, Costa Rica, 2022”

Abstract

Introducción: La adolescencia es el período de vida entre los 11 y 21 años; se trata de un momento de profundos cambios biológicos, emocionales, sociales y cognitivos en que el niño se desarrolla para volverse adulto. Los cambios pueden afectar el estado nutricional de esta población. Objetivo: Comparar el estado nutricional, según el consumo alimenticio y actividad física en adolescentes del género femenino de 12 a 17 años en la zona rural de Osa, Puntarenas y el Gran Área Metropolitana, Costa Rica, 2022. Metodología: El enfoque de la investigación es cuantitativo, de tipo descriptivo. Se evaluó un total de 74 adolescentes de la zona urbana y 53 de la zona rural. Se les aplico cuestionarios validos de hábitos alimentarios y actividad física, además evaluación antropométrica (peso y talla). Resultados: Los datos antropométricos fueron mostraron resultados muy diferentes; en su mayoría la población urbana presenta diferencias estadísticamente notorias en su peso y estado nutricional, ya que, presentan pesos más altos, así como mayor sobrepeso y obesidad en esta población. La población urbana se considera más inactiva físicamente para la edad que la población rural, donde las adolescentes practican más deporte. La comparación de hábitos alimentarios con el estado nutricional mostró diferencias donde la omisión de tiempos de comida, el mayor consumo de azúcares, grasas saturadas son más prevalentes en la zona urbana, lo que hace que esta población presente más sobrepeso y obesidad que la zona rural en la cual se realiza un mayor consumo de vegetales por la mayor disponibilidad y accesibilidad que de grasas saturadas. Discusión: La omisión del desayuno incrementa el riesgo del elegir comidas poco saludables en los tiempos de comida posteriores. Mantener el consumo promedio de azúcar evita que haya un exceso de calorías. El consumo de alimentos cargados de calorías (azúcares simples y grasas saturadas) tiende a aumentar la energía, favoreciendo el riesgo de enfermedades crónicas no trasmisibles Los beneficios de la práctica de actividad física son el mejoramiento de la salud ósea y la musculatura, mejora la resistencia cardiorrespiratoria, disminución del riesgo de padecer enfermedades crónicas no transmisibles. Los estudiantes de zona rural tienen menos predisposición de sobrepeso. Conclusiones: El consumo de ciertos grupos de alimentos no refleja que pueda mejorar o empeorar el estado nutricional de la población, porque hay muchos factores que pueden afectar en esto, como lo son: la forma de preparar los alimentos, las costumbres y tradiciones de cada población, el acceso o disponibilidad de alimentos, la cantidad de calorías consumidas, la cantidad de actividad física, períodos de ayuno, la genética